En cada gran crisis surgen grandes oportunidades. El ser humano, en su lucha por la superación ante la adversidad, es capaz de sobreponerse a los desafíos en las condiciones más desfavorables, contribuyendo al avance cualitativo de las condiciones de vida.  

    Sin duda, uno de los grandes avances que nos ha traído la pandemia de COVID-19 ha sido el desarrollo de aplicaciones basadas en TIC que nos permiten, entre otras cosas, el poder asistir a encuentros profesionales desde el confort de nuestra oficina. Un ejemplo de ello ha sido la posibilidad de asistir al IV Foro de Cruceros de Málaga que nos ha brindado el diario La Opinión de Málaga en el día de hoy, motivo de este artículo de opinión.

    Son varias las aportaciones que se han realizado, en especial en referencia a las condiciones de prevención llevadas a cabo por las compañías, pero no quería centrarme en ellas sino en dos aspectos que se han comentado ‘de pasada’ y que, a mi juicio, son importantes para un desarrollo sostenible del turismo de cruceros.

    El primero de ellos ha sido expuesto por Dña. Susana Gutiérrez, Gerente de Málaga CruisePort, quien ha comentado el trabajo que se está llevando a cabo para posicionar a Málaga como puerto base de las compañías. 
    
    Teniendo en cuenta la capacidad de los cruceros, la concurrencia temporal de atraque de barcos que tienen Málaga como escala y el tiempo de la escala, se hace muy difícil por parte de una ciudad costera el poder absorber a la totalidad del pasaje sin sobrepasar el coeficiente de capacidad de carga. Málaga, como la mayoría de las ciudades portuarias, inicia su crecimiento a partir del puerto y por tanto la configuración urbana primigenia, la que posee el encanto del paso de los siglos y donde se ubican los principales atractivos como la alcazaba; museos; restaurantes…, pero con un trazado angosto y sinuoso que no permite canalizar elevados flujos concurrentes de personas. Mención a parte es la capacidad de los propios atractivos turístico por satisfacer la demanda. 
    
    Por este motivo es importante evolucionar de punto de escala a puerto base. Entre otras ventajas permite la llegada escalonada de los pasajeros y por tanto, facilita el control de flujos y aforos. Otra de las ventajas es el aumento del ticket medio en la ciudad, ya que el pasajero normalmente acude con antelación suficiente como para disfrutar de los atractivos de la ciudad en mayor número al que realiza en una escala de unas pocas horas, entre ellos la pernocta en establecimientos locales, consumo en varios establecimientos de hostelería, ocio, etc.

    El segundo punto que quería destacar, estrechamente relacionado con el primero, es el mencionado por D. Alfredo Serrano, Director de la Asociación Internacional de Líneas de Cruceros de España, quien ha expuesto la necesidad de contar con un DESTINO a la hora de planificar las rutas. Según ha destacado, no basta con disponer de unas infraestructuras adecuadas en un puerto accesible y acogedor, sino que es necesaria la oferta de los municipios si no circundantes, si al menos situados a una distancia suficientemente corta y con facilidades de accesibilidad que permitan el desplazamiento de los cruceristas. En este caso Málaga cuenta con las comunicaciones necesarias y una oferta atractiva como para satisfacerla esta demanda, por lo que es necesario que los municipios adyacentes se coordinen para poder ofrecer una oferta complementaria adaptada a este segmento. Un ejemplo de ello es el proyecto ‘Andalusian Soul’ que ha puesto de acuerdo a Sevilla, Córdoba, Granada y Málaga para llevar a cabo una promoción conjunta, por lo que no es descabellado pensar en una promoción conjunta y orientada a este segmento, llevada a cabo por los municipios periféricos de la capital y que están viendo mermada su demanda cada vez más concentrada en temporada alta.

    En resumen, el turismo de cruceros puede conformarse como un segmento desestacionalizador que permita el renacimiento de los municipios de la Costa del Sol, siempre que su desarrollo se realice de una forma ordenada, evitando así lo que en el sector empresarial se conoce como ‘muerte por éxito’.

Juan Vázquez

Presidente Skål Internacional Málaga - Costa del Sol